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En el mundo hostelero una de las grandes variables que se presentan dentro del canal de negocio es si el establecimiento posee una zona habilitada de terraza. Según el estudio realizado por Tubbo, una terraza con capacidad para 30 personas sentadas puede generar unos ingresos diarios de 3.500€, por lo que en esos 67 días “útiles” de verano el establecimiento puede conseguir una facturación de unos 235.000€. Está comprobado que los comercios hosteleros con una terraza adaptada y con un buen diseño son propensos a atraer más clientes de calidad a su negocio.
Varios set New Island en una terraza.
En esa variable no solo entra el clima o la estacionalidad, sino también el enfoque de diseño y prestaciones que el local ofrece a sus clientes. En los varios tipos de terrazas ya sean cubiertas, semi-cubiertas o abiertas, los hoteleros ven esta extensión de su negocio como parte fundamental en la obtención de ingresos, por lo que cuidan especialmente la imagen y confort de esta zona. Todo comienza con la búsqueda de materiales duraderos en el tiempo y que resistan el desgaste de un uso muy continuado con ese toque design que haga que su negocio se desmarque de la competencia.
Es habitual que encontremos casos de negocios donde una mala gestión de los recursos de la terraza ha llevado a perjudicar seriamente los ingresos del local, llevándolos en algunos casos incluso al cierre. Por ello deberemos tener muy en cuenta que materiales, acabados y funcionalidades tienen que tener nuestras terrazas para que sean un reclamo para los posibles clientes.
Hay un amplio abanico de materiales enfocados para exterior, madera, aluminio, mimbre… materiales que pueden dar un toque muy chic al negocio de inmediato, pero que en un periodo muy corto pueden dar problemas por deterioro: oxidación, moho, irregularidades haciendo que esa costosa inversión que hemos llevado a cabo no sea una solución de futuro para mantener la imagen de nuestros negocio.
En estos casos uno de los materiales que está marcando un antes y un después en el mercado es el polietileno. Este plástico de densidad media se adapta a la perfección a todo tipo de exteriores, ya que soporta temperaturas de – 45 a +55ºC sin sufrir ninguna alteración ni en forma ni color. Si a estas propiedades le añadimos un diseño adaptado a nuestro canal de negocio las soluciones aumentan de manera considerable. Ya que la primera impresión del cliente es fundamental para que entre en nuestro negocio o no.
El cliente busca ese espacio apropiado a sus necesidades, donde poder disfrutar su tiempo en un ambiente cómodo al aire libre. Por eso es tan importante adecuar nuestra terraza de una manera correcta sin romper nuestro presupuesto. En Newgarden creemos que la calidad y precio no deben estar reñidos por lo que en 2018 ampliamos nuestro catálogo con una serie de productos enfocados para cubrir las necesidades del hostelero. Con diseños de tendencia diseñados, inspirados y fabricados en España. Con materiales que sobreviven a los cambios de temperatura y condiciones climáticas adversas con total normalidad, consolidando la inversión de nuestro negocio a muchos años vista.
Ahora es el momento de renovar nuestro negocio, dar ese toque que hará que nuestra terraza luzca como nunca y atraiga a más clientes.
